Traducciones de Bert Meyers (por Jairo TRoppa)

Porque hay mucha velocidad

Porque hay mucha velocidad y ningún lugar a donde ir
avanzamos ciegos como la luz
y nos apresuramos yendo de piedra en piedra
chocando contra el mundo,

Me gusta el caracol
envuelto en su niebla de madera
arrastrándose a través de mi patio
y que hacia donde va
pinta el suelo con caminos inútiles.

Día y noche, en este mundo, las hojas caen sin hacer sonido
y las flores se convierten en soles
a lo cuales insectos,
como planetas en su verde astronomía
dan vueltas y vueltas.

 

Día de lluvia

Afuera, nada se mueve: solo la lluvia
clavando la casa como a un ataúd.

¿Recuerdas cuando eras un niño y llovía?
En ese entonces, el mundo navegaba calle abajo:

Hojas, papeles, zapatos viejos, casas,
todas las cosas como en el desfile de un circo yendo hacia el mar.

Ahora, la lluvia, la lluvia de acero, con sus pequeñas llaves
va cerrando todas las puertas…

y pienso que todos estamos muertos. Mira como el cielo
se yergue como una lápida sobre los techos.

 

Noche con viento

El sonido del viento
es el sonido de un hombre
solo consigo mismo
en el bosque del sueño.

Un árbol es una mente resistiendo.

Caen muchas hojas secas,
finalmente la lluvia.

 


Canción de cuna

1963,
Crisis de los misiles en Cuba.

Duérmete hija
duérmete hijo
alguna vez este mundo fue agua
donde no había nadie.


En esas montañas

En esas montañas, el tiempo llenó
un arbusto con semillas de ricino,
otro con rosas silvestres…
La muerte era algo distante
que hacía a un jote poner en movimiento
su remolino en el cielo.

Junto a un árbol, encontré al ciervo
que perdieron los cazadores — una flor
de hormigas en el hoyo de la bala
y una raíz que detuvo su salto.

Allí la luz del sol bajó por un sendero
y la verde natura
se enrojeció en las puntas.
La yuca golpeada por el viento
se opacó y oxidó
con el otoño. Las lagartijas
separaron las piedras, después corrieron;
las culebras pasaron dejando sus ropas atrás.

Abajo, un pequeño pueblo,
como un tumor, comienza a expandirse.

 

Los pájaros oscuros

Los pájaros oscuros llegaron,
no conozco su nombre.

Ellos caminaron en hebreo sobre la arena
para que yo entendiera.

Ellos cantaron, el mar fluyó,
aunque nadie había hecho una vía.

Yo temblaba en la orilla
cuando el agua cerró su puerta.

Luego sentí que los pájaros regresaban
hacia mi como las cenizas a una urna,
y el sol calentó las piedras,
el fuego desnudó mis huesos.


Bert Meyers: (1928-1979) Nacido en Los Ángeles, EE.UU. Hijo de emigrantes rumanos judíos. Abandonó la educación secundaria para dedicarse a la poesía. Ejerció múltiples trabajos como conserje, temporero, pintor de brocha gorda, aprendiz de impresor, enmarcador de cuadros, entre otros. Publicó los libros de poemas Early Rain (1960), The Dark Birds (1968), Sunlight on the Wall (1976), Windowsills (1979), y The Wild Olive Trees (1979).

Jairo Troppa Ruminot: (1985, Temuco) Diseñador de productos. En 2013 publicó “Trabajos en la vía” Editorial Inubicalistas. Cofundador de Editorial Pululo.

Imagen de la cabecera: https://www.bertmeyers.com/about